Son pedazos de historia, una visión utópica del mundo o una decadencia extrema.
Por eso pienso que algunos son tan valuados. A ciencia cierta no se puede explicar la reacción que uno tiene al ver una determinada obra, pero sabes que crea algo en tí, y aunque tu mente consciente no logre traducirlo a palabras o imágenes, tu mente inconsciente sí lo hace.
Esto es lo que logra el poder del arte, son como lecciones pero, para poder consumirlo necesitas estar preparado.
Es simple, cuando el alumno está preparado, aparece el maestro. Y mientras no aceptes o interpretes la lección que el arte te esté mostrando, cada vez será mayor el impacto que logrará en ti hasta que lo aprendas.
Martín Alfonso.
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